Escritos
La ridícula idea de no volver a verte:
RESUMEN
Rosa Montero, en La ridícula idea de
no volver a verte, relaciona su vida y experiencias con su propia versión de la
biografía de Marie Curie. A través de todo el libro relata la vida Maria
Skłodowska, desde sus inicios hasta los últimos años de su vida. Enfocada en el
duelo de ambas, y expresando su admiración, mezcla relatos de su vida con la
biografía de la científica.
Describe la infancia de Curie en Polonia y las dificultades que tuvo que superar, su sueño de dedicarse a la ciencia y su determinación a cumplirlo, sus relaciones personales y descubrimientos, su vida profesional y vejez. En la narrativa, la autora habla toca temas como la locura del amor, la superación del dolor, el papel de la mujer en la sociedad, la familia, relaciones interpersonales, la importancia de la literatura, la vida y la muerte, y la intensidad de las emociones. Rosa Montero se hace partícipe como persona, pues menciona cuestiones personales y anécdotas pertinentes al relato, como lo pudo haber su difunto esposo, para enriquecer dichas experiencias.
Referencia
La ridícula idea de no volver a
verte, Rosa Montero. https://www.rosamontero.es/novela-ridicula-idea-no-verte.html
ARTÍCULO DE OPINIÓN
Los correazos son innecesarios y degradantes
Por: Daniela De Jesús Buitrago Corrales
Es probable que la mayoría de las personas no estén dispuestas a recibir
golpes o tratos denigrantes por parte de sus jefes, profesores o pareja, al
momento de realizar una acción considerada incorrecta. Esto estaría atentando
contra la integridad de las víctimas, por lo cual, no lo tolerarían e incluso denunciarían
el abuso, dado que están en su derecho a hacerlo. Lamentablemente, el panorama
cambia cuando se trata de los niños y la supuesta educación brindada por sus
padres.
Cuando un niño se comporta de cierta manera, se tiende a decir que “le
faltan unos correazos para que aprenda” o frases por el estilo, la cuestión es
que no, el comportamiento incorrecto de los niños no se da precisamente por carencia
de castigo físico, sino por falta de compromiso por parte de sus padres. Los
golpes no son la fórmula más efectiva para corregir la conducta de un niño, por
el contrario, estas acciones violentas pueden traer consecuencias graves; para
evitar esto, existen otros métodos de crianza, que no atentan contra el
bienestar físico y emocional de los infantes.
Según un informe de Save The Children publicado en 2019, Colombia
fue clasificado como el segundo país con más homicidios infantiles. Ante este
duro panorama para los niños del país, los representantes a la Cámara Julián
Peinado Ramírez y Harry González propusieron un proyecto de ley cuyo objetivo
es prohibir el castigo físico y los tratos humillantes contra niños, niñas y
adolescentes; iniciativa que fue aprobada el 23 de marzo en su cuarto y último
debate en la Plenaria de la Cámara de Representantes. "Esta ley es una ley
de prevención, no es sancionatoria y establece una política pública de pedagogía
y prevención para evitar más violencia", aseguró el diputado Harry
González, coautor de la iniciativa.
En Colombia es necesario implementar esta estrategia, dado que se tiene
normalizado el uso del castigo físico en la crianza; argumentando que este
garantiza el buen comportamiento de los individuos. Dicha manera de pensar es
anticuada y perjudicial, los colombianos tienden a pensar que, como padres, están
en toda la autoridad de tratar a sus hijos como se les antoje, ignorando que
estos niños también son personas y merecen ser tratados dignamente, sin ser
sometidos a conductas que pueden generar daños físicos y emocionales.
Juan Fernando Gómez, presidente de la Sociedad Colombiana de Pediatría,
menciona que “el castigo físico repetido constituye muchas veces el primer eslabón
de una cadena creciente de maltrato infantil, ya que las violencias las
aprendemos y las replicamos y entre más violencia se experimente en la infancia
hay más posibilidades de entrar en relaciones violentas en el transcurso de la
vida”. En muchos casos, vivir estas situaciones violentas en la infancia provoca
que las víctimas perciban la violencia como una manera adecuada para resolver
problemas, excluyendo el diálogo y la reflexión.
Entre 2015 y 2019, según un informe de la Alianza por la Niñez
Colombiana, se reportaron más de 50 mil casos de violencia contra niñas, niños
y jóvenes en todo el país. El 68% de las agresiones fueron golpes contundentes
y en menor medida agresiones con objetos corto punzantes. Gloria Carvalho,
secretaria ejecutiva de la entidad, agrega que el 60% de los agresores fueron
el padre o la madre de los niños o niñas afectados. Estudios demuestran que no
existe beneficio alguno proveniente del castigo y trato humillante en el
desarrollo de los niños educados con estos métodos.
Según Olga Alicia Carbonell, psicóloga y doctora en desarrollo infantil
y familia, y quien ha estudiado el tema de la calidad del cuidado infantil y
las relaciones afectivas en la familia por más de 15 años; la consecuencia más
grave de estas prácticas es que pueden dañar el desarrollo moral de los menores
afectados. “Cuando a un niño se le castiga físicamente, con gritos o tratos
humillantes, obedece por temor, pero no interioriza los valores, no aprende las
normas, no comprende por qué eso que hizo no es correcto y las consecuencias
que tienen sus actos sobre sí mismo y sobre los otros”, dice la experta, quien
asegura que esto solo se logra a través de la explicación, el afecto y el
diálogo.
El diálogo y el amor deben prevalecer en la formación de los niños, los
golpes y gritos no son la solución a los retos que representa el proceso de
educación. Las personas que desean ser padres tienen que ser conscientes de que
es momento de romper la cadena de violencia, para de esta manera, brindarles a
sus hijos una crianza sana, respetuosa y sin humillaciones. Los niños lo
agradecerán.
RESEÑA
Encontrar el punto medio
TÍTULO:Tiempos Recios
AUTOR: Mario Vargas Llosa
EDITORIAL: Alfaguara
PÁGINAS: 266
AÑO: 2019
GÉNERO: Novela
Centroamérica es una región poco distintiva, presente en libros, pero casi ausente para el resto del mundo. Gran parte de la población americana piensa que Centroamérica comprende a Nicaragua, Honduras, y alguna que otra nacioncilla que no vale la pena mencionar. No obstante lo cierto es que el valor de su historia está lejos de ser nulo. Se trata de una región con relatos que merecen ser compartidos, opinión de Mario Vargas Llosa comparte. Es así como en nobel de literatura nos presenta Tiempos recios, una novela ambientada en Guatemala, ansiosa por contarnos más acerca de los planes y conspiraciones que la historia guatemalteca ha presenciado.
Mario Vargas Llosa, en su novela Tiempos Recios, da a conocer varias historias singulares que convergen en conspiraciones políticas y militares que buscan hacerse con el poder, ambientadas en una Guatemala observada de cerca por el gobierno estadounidense. Mezclando ficción con realidad, es presentada una línea narrativa enfocada en los distintos personajes, que finalmente han de participar de una manera u otra en la sucesión de la presidencia guatemalteca, abarcando temas como el anticomunismo insignia de la guerra fría, las conspiraciones y complots contra el gobierno, la política y sus consecuencias. Se profundiza también en la participación de países ajenos como Estados Unidos y República Dominicana, que buscan modificar el curso político de Guatemala para proteger intereses privados, como lo podría ser el prestigio político o las ganancias de empresas norteamericanas.
Nunca fui un estudioso de Centroamérica. Es más, sigo sin serlo. Para complementar, su historia nunca me pareció muy relevante, más allá de contestar preguntas en mi clase de geografía. Jamás pensaría que una sucesión de hechos históricos podría ser tan cautivadores en mano de un escritor de renombre, valiéndose de su singular narrativa y un par de detalles ficticios. Antes de darme cuenta, estaba inmerso en la historia de Arévalo, Árbenz y Castillo Armas, intrigado por el desarrollo de la trama. Tiempos Recios es una novela con una composición peculiar, sin que esto afecte negativamente su forma de narrar los hechos. A pesar de presentar capítulos sin relación aparente, termina iluminando todos los detalles acerca de la historia guatemalteca de este periodo.
Puede no tratar un tema popular, pero Tiempos recios vale la pena un vistazo. Porque un vistazo será más que suficiente para identificar el valor histórico de la misma, y a lo mejor, captar a un par de lectores entusiastas. Mario Vargas Llosa no requiere presentación, y estuvo a la altura de las expectativas con esta novela. Vamos, que no veo razones por las cuales no darle una oportunidad
Comentarios
Publicar un comentario